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Las torres en Cerdeña: un patrimonio por descubrir
Las torres costeras se construyeron en Cerdeña desde la Edad Media hasta el siglo XIX. Estas estructuras nacieron con el objetivo de defender la isla de las incursiones desde el mar.
Felipe II, rey de España, en 1572-73 ordenó, de hecho, el patrullaje de la costa. Su proyecto era crear un verdadero plan defensivo y de avistamiento que preveía la creación de fortificaciones situadas en puntos estratégicos para permitir una rápida intervención ante el peligro que pudiera llegar desde el mar.
Para elegir dónde construir las nuevas torres se tuvo en cuenta no sólo la amplia vista al mar y las playas, sino también la proximidad a núcleos habitados, cuevas, ríos y manantiales donde se realizaba el abastecimiento de agua.
Además, las torres más pequeñas se usaban para señalar cualquier peligro, mientras que las más grandes estaban destinadas a la defensa y, por lo tanto, estaban mejor organizadas.
Actualmente hay unas cien torres que dominan la costa y que ahora puedes admirar durante tu viaje a Cerdeña. En barco, surf o paseando por la montaña o pedaleando en bicicleta, podrás emprender rutas de aventura que atraviesan paisajes agrestes, caminos y parques repletos de vegetación, hasta lo alto de los promontorios desde los que admirar las panorámicas más espectaculares del conjunto. la isla y visitar las antiguas torres costeras.
EL CAMINO DE LAS 100 TORRES
Para celebrar la importancia de estas fortificaciones, también se ha creado un nuevo camino que se convertirá en uno de los más fascinantes de Europa.
1284 kilómetros, 105 torres, 88 municipios y 450 kilómetros de playas: el camino de las 100 torres es sin duda el más largo de Italia y es un recorrido muy interesante que recorre toda la costa sarda y permite admirar paisajes, vistas, calas, iglesias, edificios que cuentan la historia de la isla en toda su historia y belleza.
Una verdadera inmersión en el pasado y en la tradición para vivirla en contacto con la naturaleza, entre las playas de arena blanca y las verdes colinas que rodean las torres de vigilancia.
Torre Argentina, Torre di Bosa, Torre di Columbargia son solo algunas de las paradas a lo largo del itinerario. Además, lo que distingue a este maravilloso viaje es la constante proximidad del mar. De hecho, siguiendo todo el camino, nunca abandonas el espectacular panorama que ofrece la costa de Cerdeña.
Puedes elegir hacer el camino en más o menos semanas optando por un viaje que varía de 45 a 60 días. El recorrido no es especialmente complejo, pero se puede recorrer fácilmente a excepción de tres etapas que atraviesan zonas montañosas que presentan algunos desniveles y requieren un poco más de agilidad.
TORRE ARGENTINA
Partiendo de Bosa, en dirección a Alghero, nos encontramos con una larga ruta panorámica de unos 40 km repleta de paisajes naturales. Paisajes multicolores, calas solitarias, playas de arena blanca y una vasta vegetación caracterizan este largo camino donde también es posible admirar, desde hace más de cinco siglos, la Torre Argentina que se asoma al promontorio de Punta Argentina.
Cerca de la torre hay calas enmarcadas por acantilados y acantilados de aguas poco profundas y de un verde intenso que alterna tonalidades de azul.
La torre aragonesa formaba parte del proyecto defensivo del Rey de España y albergaba una pequeña guarnición y el armamento que permitía a los soldados defenderse en caso de ataques repentinos.
Desde la torre se pueden realizar interesantes rutas de senderismo con las que sumergirse de lleno en la rica y salvaje vegetación mediterránea, admirando desde lo alto las espléndidas calas del camino.
TORRE BOSA
Otro factor importante que influyó en la elección de la ubicación de las torres fue la proximidad y la vista con las otras torres. La posición de la torre Argentina, de hecho, permitía un contacto visual constante con la torre Bosa, situada en la Isola Rossa frente a la playa homónima, entre Alghero y Oristano.
La torre de Bosa fue construida a mediados del siglo XVI y hoy es la más grande e impresionante del tramo de costa noroeste. Se encuentra en Bosa Marina, una localidad que ofrece una larga playa dorada con fondo de arena donde se puede practicar submarinismo, kitesurf y windsurf. Es la playa ideal para un día de total relajación, perfecta para familias con niños.
La Torre de Bosa fue conectada con el continente alrededor de la década de 1950 y completamente renovada a principios de la década de 1980. Hoy en día se utiliza principalmente como museo y es sede de actividades artísticas y culturales.
TORRE COLUMBARGIA
También conocida con el nombre de «Pesquellas», Torre Columbargia domina la playa de Sa Marinedda, tramo de costa perteneciente al territorio de Tresnuraghes.
A la torre se puede llegar a pie por el llamado Camino de las 100 Torres desde Porto Alabe, atravesando playas, caminos de tierra e iglesias abandonadas.
También esta torre, como las demás, está rodeada por el mar. El mar es transparente y cristalino con aguas muy profundas. Casi nunca está masificada, ni siquiera en temporada alta, debido a la dificultad de acceso y por ello es querida por los turistas en busca de relax y naturaleza virgen.
Llega a las famosas torres costeras de Cerdeña con los ferries de Grimaldi Lines. ¡Ven a descubrir Cerdeña y sus innumerables maravillas que nunca dejarán de sorprenderte!
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